Malas prácticas del anime

Como ya recordaréis, hice una entrada

similar referida a los juegos otomes.

Y como el mundo del anime es tan extenso o más que el de los otome, me he animado a sacar esta nueva entrega.

Todos tenemos nuestros géneros favoritos y aquello que nos encanta ver en un anime... pero también nos pasa lo contrario y hay cosas que no soportamos o que nos hacen droppearlos.

Esta es mi lista de malas prácticas del anime.

1- Los malos que nunca mueren

Es una de las cosas que más odio en los animes. Hay una batalla épica, al malo lo vencen de forma magistral... ¡pero no! X capítulos después lo tenemos de nuevo en escena, buscando venganza de nuevo a pesar de que le sacaron las tripas, le aplastaron la cabeza o lo desintegraron con una pistola láser. No sé si es por falta de imaginación, no querer meter personajes nuevos o qué, pero los malos que se niegan a morirse (muchos de ellos sin verdadera razón o motivo para reaparecer) y no dejan de dar la lata son de lo peor.
Ejemplos hay muchos, pero me viene a la mente Danny de Satsuriku no tenshi, Shou Tucker de Fullmetal alchemist, Orochimaru de Naruto (y sucesivos) o Petelgeuse de Re:zero.

2- Confesiones de amor y besos interrumpidos

Y no me refiero solamente a cuando otros personajes, animales, etc los interrumpen y no llega a producirse la confesión, sino a cuando realmente pasa, pero hay un camión, tren u avión que no nos deja oír lo que dicen. También ocurre con los besos, donde o son interrumpidos y nunca pasan por mucho que la pareja se empeñe y tenga ocasiones o realmente ocurren, pero el plano está de tal modo que no lo vemos (alejándose, enfocando los pies o tapándolos con ramas de árboles, por ejemplo)
Un ejemplo es Irozoku sekai no ashita kara, donde uno de los personajes se confiesa y pasa un tren y no lo oímos. O en una película de Sakura cardcaptor, donde Sakura es interrumpida infinitas veces cuando quiere darle una contestación a Syaoran sobre sus sentimientos.

Esta práctica también podemos extenderla a cuando hay un personaje que está diciendo algo, se le ve mover los labios... pero no oímos nada (no tiene que ser en una escena romántica) Así que nos dejan con la miel en los labios, sabiendo que dicha frase silenciosa (para nosotros) es de vital importancia peeeeero, ya si eso te lo mostraremos en otro capítulo... ¡o puede que nunca! Sí, porque también los hay de esos, que parece que se olvidan de aquella escena y es como si nunca pasara.

3- Sexualización innecesaria

No estoy hablando del ecchi o del hentai, pues obviamente vas a encontrar braguitas, pechos y demás situaciones que harán que la chica muestre mucha carne (y es que van de eso). Quiero referirme a aquellas series que no tienen ese cartel adjudicado y, sin embargo, meten ecchi gratuito en algún momento. Puede ser algo puntual o algo continuado. Cuando hable de los diferentes ejemplos, nos haremos una sencillas preguntas: ¿era necesario? ¿aporta algo imprescindible o con sentido? ¿hubiera cambiado algo si elimináramos o cambiáramos dicha escena?
Un ejemplo claro y que tuvo su polémica: la postura de las chicas en los mechas de Darling in the franxx. Contestando a las preguntas anteriores, las respuestas son fáciles: no, no y no. Así que si hubieran puesto a las chicas sentadas junto a sus compañeros o delante, pero en un sillón normal y sin mandos que le salieran del trasero, hubiera dado el mismo resultado en la serie: ambos pilotarían el mecha. Por suerte, eso fue lo único destacable en ese aspecto y la serie no sacó nada más parecido.

Otro ejemplo: Ulysses jeanne d'arc to renkin no kishi (que se puede aplicar a numerosos videojuegos y otros animes de peleas/fantasía). Resumiendo mucho: chicas que van a la batalla enseñando más que cubriendo y con pechos imposibles. Primero y lo que más va contra toda la lógica del mundo... ¡¿cómo va a pensar una guerrera que es buena idea irse a pegar espadazos contra un ejército con una armadura del tamaño de un biquini? En serio, que alguien me lo explique, porque los hombres van con armadura completa, casco y tapados de pies a cabeza. Por no hablar de la innecesaria sexualización que se hace de la protagonista, una niña que para conseguir poder tiene que besarse con el protagonista y la vemos con comportamientos nada adecuados para su edad. Si respondemos a las preguntas del principio, las respuestas seguirían siendo 3 "no".

En general hablo de animes cuya temática está muy lejos del ecchi, uno de detectives y misterio, por ejemplo, que de repente te meta planos de braguitas o pechos que no tienen ningún sentido ni propósito en la trama o la historia y que "sobran". Están tratando de atraer una atención que no tiene nada que ver con el verdadero propósito de la historia, queriendo que te fijes más en lo pechugonas que son las chicas o lo grande que es su trasero. Un ejemplo concreto lo encontramos en Occultic; nine con el personaje de Narusawa Ryouka. ¿Había necesidad de que su pecho fuera tan descomunal? ¿Aparte de para que fuera botando por ahí y Yuuta metiera la cara dentro? No, ¿verdad? Es una serie catalogada como de misterio y ciencia ficción y, vale, puedes poner a la chica con un pecho más grande que la media, pero no hasta el punto de que me dolía verla. En serio, hay mujeres que se tienen que hacer reducciones de pecho por los terribles problemas de espalda que tienen y esta chica no tendría que poder moverse con todo ese peso delante.

También podemos fijarnos en One piece y la evolución (de dudoso gusto) que ha sufrido Nami desde los inicios de la serie. No es que el dibujo haya ido cambiando o que la chica haya crecido y ahora es más adulta, no, es que ha pasado de tener una figura normal a otra inhumana. No sólo le han crecido los pechos hasta ser del tamaño de su cabeza, sino que su cintura es tan estrecha que dudo mucho que le quepan las costillas o los órganos vitales. ¿Cumple alguna función esta transformación, más allá de contentar a los fans que quieren verla en biquini para disfrutar de sus pechos? Yo creo que no y Nami seguiría siendo ella con un cuerpo más normal y proporcionado.

4- Caretos y poses imposibles

Todos sabemos lo complicado y costoso que es hacer un anime. Muchas imágenes por segundo para hacer un minuto de animación, trabajadores explotados dibujando en sus mesas hasta que se les caen las manos y un montón de fechas límite que cumplir para que siga emitiéndose en sus plazos. Pero de ahí a volverse algo totalmente irreconocible con caras (o más bien caretos), extremidades haciendo cosas inhumanas y planos que no tienen sentido hay un abismo. Tal vez crean que no nos damos cuenta o tal vez les dé igual con tal de cumplir, pero hay series que empiezan muy bien y se supone que la calidad en dibujo e imagen son uno de sus puntos fuertes... y los ves desinflándose capítulo a capítulo. O animes que, por su larga lista de capítulos, tienen que seguir saliendo de alguna forma, mejor o peor. También están los fallos de "en este plano vemos a un personaje con gafas, pero cambiamos de ángulo y ya no las tiene... y cuando volvemos al plano anterior ¡las tiene de nuevo!" Son ese tipo de fallos, como pasa en la series con personas de verdad, donde ves que han grabado en días diferentes y no se acordaban de cómo iba el personaje XD
Por poner un ejemplo: Black clover no es que sea de lo mejorcito en animación, pero empezó bastante bien... y por que han pasado de los 60 capítulos, una no espera nada en absoluto de ella. Las peleas tienen fallos por doquier, los caretos están en todas partes y se ven algunos errores gordos.

5- Flequillos transparentes y otros objetos invisibles

Es un fenómeno extraño y recurrente en muchos animes, pero no es todos, por lo que me pregunto a veces por qué unos lo hacen y otros no. En el caso de los flequillos hay multitud de ejemplos donde, aunque la persona tiene una gran mechón de pelo que le tapa un ojo... ¡este todavía se ve debajo claramente, pero con el color del pelo! Si le vas a tapar un ojo, se lo tapas del todo, si vas a hacer que se vea de todas formas no tiene sentido que le pongas pelo encima.

Otro ejemplo son las redes y vallas que desaparecen mágicamente alrededor de la cara de los personajes... En unas escenas aparece este extraño suceso y en otras no, incluso dentro de la misma serie o escena. No creo que las líneas de una red de voleibol o una malla metálica vayan a tapar tantísimo que no podamos ver la expresión de la persona.

Y también tenemos el fenómeno de la desaparición parcial o total de patillas en gente que lleva gafas. Seguro que os habéis fijado en que, cuando se ponen de perfil, desaparece una sección de la patilla, dejando ver completamente el ojo o directamente se las quitan y las gafas se sujetan solas en la nariz... Menos mal que esta práctica no se aplica a todos los personajes con gafas y se pueden encontrar mucho ejemplos de animes que respetan la consistencia material de las patillas.

6- Caídas convenientes... pero inverosímiles

Este punto no debe suponer ninguna sorpresa para nadie, ¿verdad? Al fin y al cabo es uno de los clichés más grandes del anime. De hecho hay algunos personajes que están ahí solo para dar este tipo de escenas. Por ejemplo, Tamaki, la chica-gato de Enen no shouboutai. En su primera aparición ya vemos que su uniforme deja ver más carne de la que alguien que se enfrenta al fuego debería mostrar, pero es que sólo la ponen para que el protagonista le meta mano ¡2 veces seguidas como si fuera un accidente! Oye, parece que las manos masculinas tienen un imán que los lleva directamente a los pechos u otras partes íntimas femeninas sin poder evitarlo de ninguna forma física.

Y luego tenemos, también a raíz de una caída de lo más desgraciada, los besos accidentales. No es que diga que son totalmente imposibles, pero si te caes por unas escaleras o te tropiezas con una piedra y tienes la mala suerte de llevarte a otra persona por delante, no creo que vayas a experimentar un romántico primer beso con ella. En el difícil caso de que sus bocas acabaran tocándose, creo que habría más choque de dientes y nariz que otra cosa, así que para mí no es un recurso romántico demasiado creíble.

7- Openings con spoilers

Sí, porque algunas series dicen: "¿para qué vamos a hacer varios openings si sólo tenemos 12 capítulos? Como ya sabemos qué pasará y qué personajes meteremos, vamos a ponerlos en el opening, que seguro que queda guay" Y, sí, una vez has visto la serie, está guay rememorar cosas con el opening... pero antes, pues te puedes llevar un buen spoiler. Más cuando las imágenes que acompañan a la canción pegadiza son fragmentos de los propios capítulos y encima te están contando lo que pasará en el futuro.

Un ejemplo claro es el opening de la última temporada de Shingeki no kyojin, donde nos mostraban prácticamente todas las peleas que acontecerían y varios sucesos futuros. ¿Había necesidad? Seguramente no, pero los creadores pensaron que a nadie le importaría. Otro es el de la última temporada de Nanatsu no taizai, donde todavía no sabíamos quién era Escanor... ¡pero podías verlo con los demás pecados en el opening! Sí, se cargaron el misterio ellos mismos antes de descubrirlo en la serie. No había que ser muy listo para pensar que el tipo flacucho con bigote que estaba con Meliodas y compañía sería uno de los pecados.

8- Sobreexplotación de géneros

No tenemos que irnos muy lejos para poner un ejemplo de esta práctica. La temporada de verano 2019 tiene más isekais de los que jamás haya habido juntos. Y precisamente este género es uno de los más explotados en los últimos tiempos. Con numerosas variantes y tipos diferentes de personajes pero, extrañamente, cayendo en los mismos cliches y fórmulas repetidas al extremo. No será difícil ver que los protagonistas de muchos anime isekai se parecen sospechosamente a Kirito de SAO, que en su mundo original eran unos pobres otakus incomprendidos, que acaban por crearse su propio harem de chicas kawaii que los siguen a todas partes o que tienen tantísimo poder sin apenas esfuerzo que ni los dioses ni los creadores de los mundos pueden toserles a los dos capítulos.
No digo que esté mal que un género se vuelva popular y saquen muchos al mismo tiempo... solo que para ver cosas sin sentido, copias unos de otros o algo que se centra más en lo ecchi que en otra cosa, pues para eso no lo crees como un isekai.

Algunos han querido innovar y lo han logrado, como Overlord, Konosuba, Re:zero o Youjo senki (los componentes de isekai quartet, vamos XD), pero otros han fallado estrepitosamente, como el del slime, Arifureta shokugyou de sekai saikyou, Isekai cheat magician, Maou-sama, retry!, el isekai de la mamá, Isekai maou to shoukan shoujo no dorei majutsu, Isekai wa smartphone to tomo ni... y un largo etc.

9- El uso del bait

Con esto me refiero al fanservice que las empresa meten en sus historias para llamar la atención de ciertos colectivos o a los "engaños" que utilizan haciéndote creer que algo pasará en la historia o entre dos personajes y luego se queda en nada.
El ejemplo más patente que recuerdo es de Hibike euphonium! con la relación de Kumiko y Reina. Es claramente un bait de yuri, donde nos hacen creer que las dos tendrán una relación romántica en algún momento, forzando incluso esa impresión con planos y frases a propósito, aunque al final nunca pasa nada.

10- Adaptaciones infieles

Adaptar un manga o una novela ligera a anime tiene muchas dificultades y es irremediable que no se pueda hacer algo totalmente fiel, a no ser que cuentes con ilimitados capítulos para hacerlo. Esto quiere decir que un manga o novela que lleva tiempo publicándose, sólo tenga 12 o con suerte 24 capítulos de anime. Así que ciertos personajes o escenas quedarán eliminados nos guste o no. Ahora bien, se puede hacer una buena adaptación de un manga o novela siempre y cuando se respeten las bases más importantes y aquellos personajes relevantes.
Volvemos al ejemplo de Hibike euphonium, donde, para reforzar aún más el bait yuri del anime, desecharon por completo la relación de Kumiko con Shuuichi, quienes terminan juntos en la novela ligera original. Ahora bien, ¿merece la pena cambiar lo que ha creado la autora sólo para "hacer ver" que hay una relación entre dos chicas cuando en realidad no la hay?

O algo más reciente y que a mí me ha indignado. Netflix está invirtiendo muchísimo dinero en estudios japoneses para hacer nuevos animes con algo más de los gustos del resto del mundo. Se ha anunciado que van a sacar una película de Saint seiya... ¡pero han convertido a Shun (Piscis) en una mujer! Yo soy piscis y jugaba de pequeña con los muñecos de la serie y veía esta en la televisión. Siendo una niña, no podía comprender por qué el caballero de mi signo era más afeminado que los demás, por qué usaba rosas y cadenas como arma y por qué era tan puro y bondadoso. Me daba envidia que mis hermanos tuvieran caballeros tan chulos como Seiya o Hyoga y yo no. Pero siendo más mayor, todo tenía sentido y le cogí un gran cariño al personaje, sintiéndome orgullosa de que Shun representara tan bien las cualidades de un piscis: puro, bondadoso, pacifista, delicado, etc. Por eso no entiendo la decisión (totalmente innecesaria y sin sentido) de Netflix de convertirlo en una chica de repente. Los guionistas decían que era para "representar a la mujer" en la obra y hacer ver que no sólo los hombres podían salvar el mundo. Se plantearon darle más protagonismo a Atena y que luchara con los caballeros... pero no, decidieron coger al chico dulce que iba de rosa y transformarlo en mujer, pensando que no se notaría la diferencia y sería aceptado. ¿Por qué? Shun representa a un gran número de hombres en la sociedad que son sensibles y aún así pueden darte una paliza si pones en peligro a sus amigos. Si querían que la mujer se viera más representada, que se hubieran inventado otro personaje de cero o que, efectivamente, le dieran otro papel a Atena. La obra es como es, tenga 30 o 50 años y no deberían forzarla para adaptarse a los nuevos tiempos. Entiendo que su intención era buena, pero hay montones de animes donde es un grupo de sólo chicos los que  hacen cosas increíbles, especialmente en los spokon y las chicas están ahí como las mánager, las novias o ni eso.

Y hablando de adaptar historias antiguas a tiempos modernos, tenemos el ejemplo de Banana fish, un manga de los 80 que se ubica en Nueva york. En su adaptación han hecho pequeños cambios para adaptarla a nuestros tiempos, incluyendo ordenadores y teléfonos móviles que, obviamente, no estaban disponibles en los 80. Pero eso no afecta a la esencia y la historia, sólo hace que, si los personajes quieren mandar un mensaje, no tengan que ir con chicos de los recados o cartas, sino que mandan un mail y punto. Eso es un cambio respetuoso y totalmente legítimo, como tantos otros que se pueden hacer porque hay incompatibilidades entre el papel y la imagen o para darle más fuerza a tal o cual escena o aspecto de la historia. También es comprensible suprimir ciertos personajes secundarios o no profundizarlos tanto como en las obras de papel. Ocurre lo mismo con el cine y las series basadas en novelas de más de 500 páginas, por ejemplo. Por algún lado tienen que cortar y hay adaptaciones mejores o peores, como en todo.
Ocurre también que  hay series que directamente suprimen escenas o sucesos del manga para, literalmente, inventarse otros en su lugar. Es ejemplo más evidente y reciente para mí es la segunda temporada de Tokyo ghoul:re. Gracias a los videos de Umaru-chan sobre la misma (os recomiendo su canal si no lo conocíais ^^) se ve claramente la gran cantidad de cambios que han hecho de un formato a otro, comiéndose información importante, inventándose otra y cambiando otra tanta, haciendo que el anime sea confuso a veces y se sienta menos épico e interesante.
Totalmente al contrario del caso anterior, tenemos la adaptación de Shingeki no kyojin al anime, donde el propio autor del manga está trabajando para mejorar cómo se cuenta la historia, reconociendo que hay ciertas partes que no le gustaron cómo quedaron en el manga. Así que, en vez de empeorarlo o simplemente copiar el manga tal cual, ¡también se pueden hacer cambios para mejorar la historia al pasarlo al otro medio! Es sin duda un ejemplo a seguir. En vez de hacer un contrato con el autor donde simplemente te dan los derechos de la obra y tú ya haces lo que te da la gana con ella, mejor colaborar y hacer juntos algo mucho más pulido y mejor, con las ventajas del anime.

11- ¿Violencia inadecuada?

Hay historias cuya violencia está "justificada" porque es parte de la trama y tiene un papel importante en la misma o para los personajes y su evolución. Ahora bien, ¿debemos mostrar violencia cruda y gore cuando podemos "ocultarlo" o no mostrarlo tan explícitamente, que el espectador se va a enterar igualmente de lo que ocurre?

Dos ejemplos claros son el primer capítulo de Goblin slayer y el capítulo 10 de SAO Alicization. En ambos aparecen dos violaciones bastante explícitas, por no decir asesinatos y crueldad a raudales. Uno puede comprender el por qué de esas escenas y qué quieren mostrarnos de los personajes involucrados y cómo repercutirá en la historia. Pero, ¿era necesario ser tan explícito? De hecho las redes sociales se caldearon bastante con estos capítulos y hubo bastante controversia. A algunos les daba igual y vieron las escenas con toda la tranquilidad del mundo, mientras a otros iba a darles un ataque (yo estoy más en este último grupo). Esto depende la sensibilidad de cada uno, pero creo que ninguna mujer que viera dichas escenas lo hizo como si nada.
En definitiva, lo que quiero decir es que (igual que pasaba con la sexualización o el ecchi inadecuado) la violencia a veces se pasa de gore en algunas series que normalmente no meten este tipo de contenido y no se basan principalmente en esto como Blood-c, por ejemplo, que es realmente sangrienta)

12- Abusando del 3D

Es innegable que los tiempos están cambiando y que la tecnología ha hecho posible cosas que parecían imposibles en la industria del anime. No sólo las tabletas gráficas, los programas de retoque de imágenes o cualquier otro aparato tecnológico que haga la vida del dibujante más fácil. Pero eso también hace que el 3d haya hecho su aparición con fuerza en muchas series, hasta el punto de que hay algunas que son hechas íntegramente en 3d. Podemos encontrar joyas como Ajin, Sidonia no kishi, Ronja, God eater o Houseki no kuni que han sabido aprovechar este medio muy bien. Pero también es verdad que a otras no les ha salido tan estupendamente, como Berserk, por ejemplo.

Otras muchas introducen el 3d para ahorrarse la tediosa tarea de dibujar 200 extras que pasaban por allí, los caballos de un ejército o ciertas partes del escenario que van a pasar super rápido por la pantalla. ¡Y eso está perfecto! Apoyo totalmente esta opción para ahorrar tiempo y no matar a los pobre dibujantes haciendo detalles que no tienen real importancia. Cada vez con más frecuencia, podemos fijarnos en que los viandantes son en 3d, pero eso realmente no molesta y puede que ni te des cuenta. El problema es cuando lo que pones en 3d es un elemento importante y central. Un claro ejemplo lo vemos en los titanes de Shingeki no kyojin, cada vez más y más en 3d. De hecho, se ven planos donde mezclan el 3d con 2d de forma un poco chocante, quitando toda la presencia y la fuerza que los titanes tenían en la primera temporada, por ejemplo. Que implantes un nuevo método está bien, pero si el tiro te sale por la culata y pierdes calidad e impacto... ¿merece la pena?

13- Protagonista con cara oculta

Esto ya es algo a nivel personal, pero que también hace que sienta que la historia o los creadores son crueles con los espectadores: cuando un personaje lleva parte o la totalidad de la cara oculta. Hay casos donde es el protagonista y, oye, en principio no hay problema, da misterio al personaje y te hace interesarte incluso más. El problema viene cuando se dan ocasiones donde otros personajes ven su cara ¡pero nosotros no! O situaciones perfectas para que muestre por fin su rostro... pero ocurre algo que los interrumpe, por ejemplo.
El caso más notable (y que más me enfadó) fue el del protagonista de Goblin slayer. Si nadie hubiera visto su rostro en toda la serie, vale, podría entenderlo... ¡pero es que todos los personajes ven su cara y nosotros sólo su nuca! Es totalmente injusto. Y no digo que se elimine la máscara o casco una vez mostrado el rostro, pero hay otras series que han sabido llevarlo mejor. Por ejemplo Kakashi, de Naruto (del cual nos dejan ver su cara de forma inventiva) o Inosuke, de Kimetsu no yaiba (que aunque vemos su cara, luego sigue con su cabeza de jabalí la mayoría del tiempo)
Jugar con las expectativas y los misterios en personajes enmascarados está muy bien, pero hay que saber cuándo darle algo más a los espectadores para que no se tiren de los pelos.

¡Eso es todo! Espero que hayáis coincidido con algunas de mis opiniones y hayáis pasado un buen rato.

¡Nos leemos!