sábado, 14 de marzo de 2020

Personajes que no soporto

Hoy os vengo a hablar de algo que no me gusta...
Todos tenemos personajes que nos gustan y a los que adoramos por unas razones u otras.
Pero también ocurre lo contrario, ¿no?
Personajes a los que no podemos ver, que nos ponen de los nervios en cuanto aparecen en pantalla y deseamos que no vuelvan a aparecer.
Pues ese será el tema de esta entrega.

Recordad que esta es sólo MI opinión y que no pretendo ofender a nadie ni atacar a los fans de los personajes de los que hablaré. Todos tenemos nuestros gustos y respeto los de todos, aunque no sean iguales a los míos.

Empezamos con un clásico y que no es una sorpresa. Lo he dicho en muchas ocasiones ya...

Nanami Haruka - Uta no prince-sama

Lo de esta chica no es normal, lo mires por donde lo mires. Es el ejemplo perfecto de cómo NO hacer una heroína de juego/anime otome. Podría dar mil razones de por qué me parece una pésima protagonista, pero sólo mencionaré algunas: sus reacciones cuando se le acerca un chico son: gritar, quedarse paralizada o balbucear; se tropieza con la línea de un lápiz pintada en el suelo; su aportación a la serie (sobretodo al final) es sólo escribir y dar las canciones; no es capaz de tomar decisiones (con respecto a los chicos) o mantenerse fuerte en sus opiniones, y un largo etc. Es la perfecta anti-heroína.

Aijima Cecil - Uta no prince-sama

Con este personaje siento que confluyeron diferentes aspectos horribles que me han hecho no aguantarlo a niveles estratosféricos (más aún cuando estoy jugando el juego de ritmo de Utapri y ahí también tengo que soportarlo) Su diseño me gusta, tengo que admitirlo y me parece atractivo... pero luego tienes a un pedazo de seiyuu como Toriumi Kousuke que ha interpretado papeles muy molones, poniendo voz de pazguato y aportando 0 en las canciones, a mi entender. Y entiendo que el personaje es así y que hay que comprender que es extranjero y no sabe bien japonés y todo eso, pero de ahí a parecer "tonto" hay un abismo. Natsuki también tiene un lado infantil muy marcado y facetas muy adorables que contrastan mucho con su altura, por ejemplo, pero no me cae tan mal como Cecil. Sobretodo porque parece usar todo lo que me parece "malo" como excusa para acercarse y manosear a la protagonista con mucho "princesa" y romanticismo principesco.

Minagawa Akane - Kuzu no honkai

Mmm, qué puedo decir de esta "señora" sin insultar... La serie en sí tiene para discutir un rato de los personajes y sus acciones, pero Akane se lleva la palma por ser la mala malísima sin sentimientos ni conciencia. Su vida se basa en "voy a hacer el mayor daño a los demás y me importa todo un pepino, porque puedo hacerlo y lo disfruto". Así su principal objetivo es hacerle daño a Hanabi, cueste lo que cueste. ¿Que hay que fingir querer al profe y acostarse con él aunque no me interesa y me parece ñoño y aburrido? ¡Por qué no! ¿Que resulta que Hanabi está "saliendo"con un compañero al que en realidad le gusto yo? ¡Venga, me lo llevo a la cama igualmente para pisotear sus sentimientos después! No, no puedo. Y su final de "redención" me pareció super vago y falso. Esta mujer tenía serios problemas psiquiátricos y que el profe le demuestre amor y confianza después de todo lo que le hace no va a hacer que abra los ojos y piense: ¡Oh, ya estoy curada de la maldad incrustada en mi ser!

Shiba Miyuki - Mahouka koukou no rettousei

Creo que esta chica fue una de las primeras del anime a las que no pude tragar, que yo recuerde vivamente. Lejos de parecerme guay y mona, cada vez que aparecía con su "onii-sama" todo el rato en la boca, suspiraba y me llevaba las manos a la cabeza. No me gustaba su doble juego de "soy una ojou-sama modélica para todo el mundo, pero en realidad tengo un brocon que no puedo con él en secreto". En serio, hay varias escenas donde pensaba que iba a abusar de Tatsuya... porque eso era lo que quería. Tiene una doble personalidad y, vale, no son hermanos de verdad y todo lo que quieras, pero si te has criado con otras persona como tal, se te tiene que hacer raro sí o sí el pensar en él/ella románticamente.

Sakaki Momo - Fukumenkei noise

Otro personaje al que le da igual todo, pero este encima hace daño "para proteger". No me gusta esa excusa para arrasar con los sentimientos de los demás, sin explicaciones y sin miramientos. Porque Momo tiene una horrible madre, eso lo acepto y se supone que no quiere involucrarse con Nino para que ella no le haga daño... ¿pero para eso tienes que ser un borde y un capullo con la chica, hasta el punto de hacerla llorar cada vez que te ve? No sé, te sientas con ella y se lo explicas, que se lo merece después de haberte buscado durante años. Y luego hay que perdonar su comportamiento porque "en realidad la quiere mucho". ¡No! Yuzu sí que la quiere y lo demuestra, le pese a quién le pese.

Melromarc Mein - Tate no yuusha no nariagari

La muy bien llamada "kitsune del infierno" por Kalathras, es un personaje puesto ahí para fastidiar, punto. Cada vez que aparece dan ganas de darle una patada para que se vaya por donde vino, porque se ha obsesionado con hacerle la vida imposible a Naofumi... y no entiendo realmente por qué. Ya desde el primer capítulo, donde se hace "la buena" para tenderle la trampa a Naofumi y donde comienza su gran pesadilla, me dio muy mal rollo y el sentimiento de antipatía por ella no ha hecho más que crecer. Motoyasu es un payaso que se deja manipular por ella, al igual que su padre, y nadie en todo el maldito reino parece ver sus trampas o que es una egoísta y rastrera. Sobretodo cuando ha tratado de matar a su propia hermana delante de ellos o la han pillado haciendo maldades. 

Yuuki Miaka - Fushigi yuugi

Chica en un mundo alternativo de fantasía, que se monta un harem... y no tiene cerebro. No, no es de un juego otome, pero podría, la verdad. Tiene todos los ingredientes para rivalizar con cualquier heroína otome de tres al cuarto. No me molestan las peculiaridades que la hacen "diferente", pero es que era muy pesadita con cosas que no tenían sentido, para hacer "gracia". La historia caía en muchos clichés y su romance con Tamahome era tan... predictivo y aburrido. Es de las que se quieren esforzar al 1000% y sin embargo la mayoría de las veces le sale mal por lo patosa o tonta que es, entorpeciendo a los demás o haciendo las situaciones mucho peor de lo que eran al principio. Y no digo que sus intenciones no sean buenas... pero pararse a pensar un poco o hacer caso a los demás, a veces no viene nada mal.

Himeragi Yukina - Strike the blood

Aunque Yukina podría ser catalogada como "tsundere", es del tipo que no soporto. En la misma serie podemos encontrar otra tsundere, Sayaka, y esta sí es del tipo que me gusta. Porque Yukina hace como que todo lo que hace o dice Kojou le molesta, pero quiere que esté pendiente de ella y es de las que se ofende cuando le dicen al chico que no las mire y este obedece. No me gusta tanto "senpai" para acá y para allá, que se comporte posesivamente con él, como si fuera su novia, y luego le dé como reparo ofrecer su sangre, aunque en realidad lo está deseando. No es capaz de verbalizar sus sentimientos, pero espera que él se dé cuenta y la elija siempre a ella. Básicamente es egoísta, pero no lo dice y es como si todo el mundo tuviera que darse cuenta, sobre todo Kojou.

Asahina Fuuto - Brothers conflict

Personaje que se hace el bueno y el hermanito mono, pero que está esperando que bajes la guardia un segundo para tirarse sobre ti. A Fuuto le gusta jugar un doble juego: el de inocente y que no ha roto un plato, para convertirse en un demonio devorador si parpadeas. Personajes que van con segundas no me suelen gustar, por que siento que no te puedes fiar de ellos y que siempre tienen segundas intenciones tras lo que dicen o hacen abiertamente. Además estaba todo el rato en pie de guerra con Yusuke, mi favorito, peleando por las atenciones de la protagonista, así que eso también me ha influido para no soportarlo.

Nejima Yukari - Koi to uso

Para terminar, un personaje que no soporto por su indecisión patológica y su forma de ir por la vida. Vale que seas tímido, retraído e introvertido... pero de ahí a hacerte el santo y el tonto cuando en realidad estás jugando con los sentimientos ajenos... no me vale. Y mucho menos que hagas como que no te das cuenta. Porque el chico dice estar enamorado de una chica, pero no le importa lo más mínimo liarse con la que el gobierno le ha adjudicado mientras sea mona. Y, oye, que cuando lo ponen en la tesitura de elegir... ¡elige a las dos y se queda tan pancho! Habría que hacerle mirar también a las dos chicas en cuestión qué le han visto a este chico (y ya de paso también al amigo) porque debe de estar secretando algún tipo de controlador mental raro para que tanta gente se cuelgue de él sin razón.

¡Eso es todo! ¿Cuáles son los personajes que no soportáis y por qué? 

¡Nos leemos!

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